lunes, 26 de diciembre de 2011
Narciso Bayón por Ana Bayón
Hace unos días tuve la suerte de recibir un correo de Ana, hija del gran afichista Narciso Bayón. Le había hecho algunas preguntas sobre los materiales que usaba su padre, el proceso de ilustración de los afiches y sobre la vida en la casa de un artista, y muy amablemente me mandó estas líneas:
... los materiales con que realizaba los afiches, era témpera. Aún recuerdo la marca Eureka de color blanco. Un soporte fino de cartón bristol de ciertas capas que adquiría en Villalba... También papeles alemanes para los chistes que hacía en el interior de la revista PBT. Estos eran realizados en tinta china, plumín y pincel. Se llamaban: Paginas Subrayadas. La portada de PBT era realizada en cartón bristol de ciertos pliegues y témpera. Sus pinceles eran de pelo de marta, de la mejor calidad como todos los materiales que usaba. Hizo revistas y afiches al mismo tiempo y creo que era película por película. El encargo de un afiche venía acompañado de material fotográfico de la película. Tenía que componer el afiche e incluía la tipografía que él eligiera... Tomaba su tiempo en el boceto y luego el afiche aparecía ante mí como una obra de magia. Su destreza como dibujante es y era inigualable. Te cuento que mi padre era un ser sociable, carismático, tenía muchos amigos y también conocidos. Era amigo de Venturi... sentí nombrar a muchos como Meliante, Breccia, Garaycochea, Borisoff, Pereyra, Mezzadra... una lista interminable. Creo que lo que recibía por su trabajo estaba bien, pues vivíamos bien. También fue profesor en la Escuela Panamericana de Arte. Creo que su trabajo terminaba con el original, pero tal vez no, porque él iba a la imprenta para la tipografía y posiblemente para mirar como salía el afiche. Le gustaba su trabajo y era de esas personas que se las ingenian para todo. El fue y es mi ejemplo de vida. Recuerdo su mesa de dibujo como si la estuviera viendo...
Para ver las pinturas de Ana, pueden clickear acá
Las imagenes del afiche de "Detective" son de la imbatible colección de Fabio Manes.
viernes, 11 de noviembre de 2011
Bailarinas para Buenos Ayres
A lo largo de la historia han aparecido subgéneros como el blacksploitation (con temáticas y protagonistas negros), el sexploitation, las películas de delincuentes juveniles, de motoqueros, de nudistas, el mondo (documentales sensacionalistas) y una larga lista.
Uno de estos subgéneros, tremendamente popular en los inicios del cine fue el white slavery o películas sobre trata de blancas. Desde principios de siglo hasta los años 40 se filmaron cientos de films sobre mujeres caídas en desgracia, forzadas a la prostitución por hombres extranjeros o necesidad económica, con fuertes mensajes moralizantes e intención de perturbar al público (para por supuesto llevarlo a las salas).
Durante el apogeo del subgénero, operó en Argentina una enorme red de trata de blancas conformada por proxenetas judíos/polacos bajo la fachada de la "Sociedad de Socorros Mutuos Varsovia". El centro operativo de la organización era Buenos Aires, y llegó a monopolizar la prostitución con 430 proxenetas que controlaban 2000 burdeles y 4000 mujeres.
La organización reclutaba mujeres jóvenes en Europa del Este aprovechando la crisis económica de posguerra y los pogroms, con falsas promesas de matrimonio o trabajo como empleadas domésticas de ricas familias judías. La Zwi Migdal desaparece en 1930 gracias a la denuncia de una joven polaca que derivó en el allanamiento de su sede central y la encarcelación de la mayor parte de sus socios.
Ese mismo año, la productora alemana Hegewald Films presentó Tänzerinnen für südamerika gesucht (Bailarinas para sudamérica), un drama en 8 actos protagonizado por Dita Parlo y dirigido por Jaap Speyer. El argumento, según el documento de la izquierda es más o menos así: una chica joven de Alemania es llevada como bailarina a América del Sur por atractivos anuncios en los periódicos. La película muestra sus experiencias allí, y su liberación gracias al periodista Gerhard.
La película fue estrenada en Alemania y Austria. Como se puede ver en los siguientes programas, el atractivo principal en uno es la protagonista, ya popular en su país de origen. El otro reproduce una imagen común en muchos de los afiches del subgénero: la víctima forcejeando con su explotador.
En España tuvo también su estreno en 1933 con el nombre Mercado de mujeres, distribuida por Sonoro Film y con el auspicio de la Liga Abolicionista y el Patronato de protección de la mujer. Las críticas la destacaron como una película de una cruda realidad y de un interés humano extraordinario.
En su segunda semana de exhibición decían los diarios: Tan magnífica acogida ha tenido "Mercado de mujeres", que la Empresa se ve obligada a prorrogarla en el cartel.
En las imágenes de este programa de mano español (cortesía del especialista Paco Moncho Pascual) se puede leer un argumento más detallado.
Durante los años 20 y 30, Argentina fue un enorme mercado para el cine alemán y -aún sin datos que permitan afirmarlo- no sería raro suponer que, teniendo en cuenta lo sensible del tema y el lugar de desarrollo de la acción, la película no haya sido estrenada en el país.
En Bélgica sin embargo, sin riesgo de herir susceptibilidades nacionales, el film de Speyer se estrenó en el cine Roxy con el más acertado título de Bailarinas para Buenos Aires
viernes, 7 de octubre de 2011
Los gauchos yugoslavos
De este último país se presentaron varias producciones: el film fantástico Cudotvorni mac (La Espada Mágica, 1950) y el drama Ciganka (La Gitana, 1953), ambas de Vojislav Nanovic; U oluji (La Tormenta, 1952) de Vatroslav Mimica y Kekec (Kekec, 1951) de Joze Gale.
Como parte de un intercambio, varias películas nacionales se enviaron a Yugoslavia, como Deshonra de Daniel Tinayre; Las aguas bajan turbias de Hugo Del Carril, y La dama del mar de Mario Soffici. Hacia allá fue también La guerra gaucha de Lucas Demare como demuestran este afiche y el programa de mano de su estreno.
martes, 4 de octubre de 2011
Il dottor Soffici
viernes, 30 de septiembre de 2011
Osvaldo Venturi y las reposiciones de Guaranteed Pictures
Afiche y aviso de Congorila (Congorilla, 1932), la primera película sonora filmada íntegramente en Africa.
Afiche doble y aviso de Las cuatro plumas (The Four Feathers, 1939)
Stop-motion nacional
viernes, 23 de septiembre de 2011
Fiebre con permiso
Existieron (¿o aún existen?) varios decretos y resoluciones de la municipalidad de la ciudad de Buenos Aires que regulaban las imagenes expuestas en la vía pública (o al menos en las vidrieras de las salas). Varios afiches nacionales tenían la información impresa, como éste de Fiebre de Armando Bó, autorizado por el Permiso Municipal Nº12611/72.
miércoles, 21 de septiembre de 2011
Un viejo afiche para una nueva y gloriosa nación
Hacia mediados de los 20, con gran éxito en el negocio de la distribución y ya propietario de varias salas, Ajuria se empecina en realizar un film histórico con los más altos valores de producción de la época. Busca financiación en las productoras norteamericanas cuyas películas distribuía y al no conseguirla, la hace con capital propio (presuntamente un millón de dólares)
Así, su proyecto se convierte en el primer y único film de Hollywood producido completamente con capitales argentinos. Filmada en los estudios de Fox Film Corporation, la historia narraba los eventos siguientes a la Revolución de Mayo que involucraron a Manuel Belgrano y concluía con una recreación de la Batalla de Salta. El título era "Una nueva y gloriosa nación" y parece ser que en el país fue un éxito tal que se proyectó ininterrumpidamente por dos años.
Para el público norteamericano el tema no era tan atractivo, aún cuando los comunicados de la época intentaban vender a Belgrano como el George Washington de América del Sur. Allá se estrenó como Charge of the gauchos en una versión reducida y promocionada con afiches como éste.
La empresa distribuidora fue Film Booking Offices of America Inc. (FBO) que con la llegada del sonoro se fusionaría con RCA y otras compañías formando la RKO.
viernes, 26 de agosto de 2011
La industria, el Estado y el diseño gráfico nacional.
En los años 20, se crea YPF y asume su presidencia el General Mosconi, amigo de Di Tella, quien le propone la fabricación de surtidores de nafta para las nuevas estaciones de servicio creadas por la petrolera estatal. SIAM fabricaría surtidores y equipos de bombeo para YPF hasta el golpe de 1930. La expulsión de Mosconi de la empresa y la caída de Yrigoyen motivada en parte por su política petrolera nacionalista y antimonopólica, obligan a SIAM a diversificarse. Fabrica heladeras industriales, familiares y otros electrodomésticos hasta los años 50 cuando empieza a producir motos y autos. (la Siambretta y el Siam Di Tella 1500).
En 1961, la empresa ya dirigida por los hijos del fundador (fallecido en 1948) crea Agens, una agencia que se encargaría exclusivamente de la publicidad de SIAM, y en 1963 el Centro de Artes Visuales del Instituto Di Tella, de cuyo Departamento de Diseño surgiría una camada de diseñadores que renovarían el diseño nacional. Entre ellos Guillermo González Ruiz y Ronald Shakespear, creadores de varios afiches de cine como este para Breve Cielo (1969)
Años después, Shakespear diseñaría el Plan Visual de Buenos Aires, que abarcaba las señales peatonales, vehiculares y reglamentarias de la ciudad (junto a Gonzáles Ruiz), y la señalización del sistema de subterráneos de Buenos Aires, que permite que gente como yo, no se pierda cuando viaja a Capital.
jueves, 18 de agosto de 2011
miércoles, 17 de agosto de 2011
Tipos de afiche: por tamaño. Anexo 1
A la izquierda, uno nacional de "La bodega" (1929), primer film español de grandes proporciones con canto y música de Granados, Albéniz y Falla. Impreso en Establecimiento Gráfico Argentino e ilustrado por "Benesch".
Más abajo, uno de "Balada para un mochilero" (1971), impreso en Aler e ilustrado con una caricatura del protagonista realizada por "Barrosa" y otro de -probablemente- una reposición de "Los días calientes" (1966) de Armando Bo, impreso en Springer y Cia que promete a Isabel Sarli como nunca! en EASTMANCOLOR. Ambas imagenes son cortesía del gran Fabio Manes.
viernes, 12 de agosto de 2011
Próximamente, en 1936
El año pareciera ser 1936, según las películas que se estaban exhibiendo: Colleen la modistilla (Colleen, 1936), Lo que vendrá (Things to come, 1935), Ya tiene comisario el pueblo (1936) y Zarpas de terciopelo (The Case of the Velvet Claws, 1936). ¡Gracias al comentario anónimo por el dato de la película!
martes, 21 de junio de 2011
Gran éxito vampírico en el Ambassador
La revista es interesante no sólo porque tiene una portada dibujado por el afichista Narciso Bayón (ver firma abajo a la izquierda) sino también por tener un aviso a página completa promocionando el gran éxito de "El vampiro negro" en el Gran Cine Ambassador (en calle Lavalle 777) a nueve días de su estreno.
El anuncio usa el mismo arte del afiche creado por Rafael Faillace (RAF) pero con algunos cambios.
Además de una distribución distinta de los textos, se eliminaron las alas de murciélago debajo de la cabeza de Nathan Pinzón y el estilo de las letras del título es quizás más adecuado con el tono de la película que el de las letras usadas en el afiche.
Quien quiera convertirse en parte de mis mejores amigos, haga como Germán y mándeme cosas como éstas de regalo.
jueves, 9 de junio de 2011
Triple programa de Laurel y Hardy
Gracias a Nicolás Prinzo por la foto.
martes, 31 de mayo de 2011
Greta Garbo según Ermete Meliante
La imagen pertenece al número 3 de la revista con fecha marzo-abril de 1931, cortesía de la -impresionante- colección de Fabio Manes.
miércoles, 25 de mayo de 2011
El concurso del gaucho
Del diario La Nueva Provincia, jueves 22 de octubre de 1953.
domingo, 1 de mayo de 2011
López Lagar, Sandrini y Gable según KRAS
Como ya dije en algún momento, la información sobre los artistas que trabajaron en la promoción gráfica de películas es extremadamente esquiva. A. Krasnopolsky (KRAS), ilustrador al que no conocía, no sólo creó varios afiches, sino avisos publicitarios y también los títulos de varias películas nacionales y extranjeras.
Gracias nuevamente a Carlos Martínez por enviarme esta información que proviene de el Anuario de la Asociación de Dibujantes de la Argentina de 1944.
Afiche de Veinte años y una noche (Alberto de Zavalía, 1941). Kras también diseñó los afiches de Intrusa (Julio Saraceni, 1939) y ¡Palabra de honor! (Luis Cesar Amadori, 1939)
Estas son las páginas originales del anuario.
jueves, 21 de abril de 2011
Hoy gran estreno y liquidación de sedas
sábado, 12 de marzo de 2011
De la importancia de los afiches en la historia del cine nacional
Floren Delbene cuenta cómo un inconveniente en el diseño de un afiche terminó dándole el nombre con el que quedaría en la historia del cine nacional (y en su propia familia) en el libro "Reportaje al cine argentino. Los pioneros del sonoro"
jueves, 27 de enero de 2011
Cosa de negros
Sospechando un secuestro, los Dalton contratan un detective privado. Bigger decide aprovechar la confusión, y escribir una nota falsa, exigiendo un rescate que lo saque de la pobreza. Antes de poder cobrar el rescate es descubierto y huye con Bessie, su novia (también negra) y se esconden en un edificio abandonado. Temiendo que lo denuncie, la asesina a ladrillazos en la cabeza y la tira por una ventana (¡!). Es atrapado y encarcelado y el final de la novela es una dura crítica al sistema judicial de la época y a la ideología racista. El proceso judicial se centra exclusivamente en el asesinato de la chica blanca, mientras que el de la chica negra es completamente desestimado. El alegato humanista de Boris Max, el abogado defensor judío, es considerado ridículo e ignorado por el jurado y Bigger es condenado a muerte.
Un año después de su publicación, la novela fue adaptada al teatro en una versión un poco menos escabrosa, producida y dirigida por Orson Welles.
En una epoca en que los actores negros quedaban relegados a papeles de sirvientes en comedias o en algún número musical, una versión cinematográfica era una idea bastante demencial. Wright ignoró propuestas de grandes productoras para adaptar al cine su exitosa novela, como la que le hizo Metro Golwyn Mayer… ¡sugiriendo que el protagonista fuera blanco!
En 1947 Wright se muda a París donde conoce al director belga Pierre Chenal y emprenden el proyecto de llevar la novela al cine con financiación francesa.
Era época de posguerra y el Comité de Actividades Antiamericanas (House Un-American Activities Comité o HUAC) no iba a permitir que Estados Unidos, que había liberado Europa del fascismo fuera presentado como un Estado racista. Francia era en ese momento uno de los beneficiados por el Plan Marshall, un plan norteamericano de asistencia económica destinado a la reconstrucción de Europa después de la guerra (y a evitar el avance del comunismo). Ante la presión, el Estado francés le quitó la financiación al proyecto y Chenal propuso filmarla en Argentina (donde ya había dirigido "Viaje sin regreso", "Se abre el abismo", "El muerto falta a la cita" y "Todo un hombre").
La producción corrió por cuenta de Argentina Sono Film y Classic Pictures y Wright, el autor, terminó protagonizándola aún sin tener experiencia actoral y siendo de mayor edad que el personaje de su novela. Se estrenó en Buenos Aires en marzo de 1951 con el título de “Sangre Negra” y a pesar de ciertas imperfecciones (como la inexperiencia actoral de Wright) fue un gran éxito. El afiche que la promocionaba fue dibujado por “Romu Le Zappa”, impreso en “Springer” y al ser hecho unos meses antes del estreno, tiene un texto común en los de ese año ("1950 . Año del libertador Gral San Martín").
El afiche al principio del post (ilustrado por “Negrín”) también fue usado en el país, pero es menos conocido.
El diseño nacional fue respetado casi totalmente en el afiche que promocionó la versión estrenada en Estados Unidos (con cortes de 25 minutos de la New York State Board of Censors) y en Canadá donde agregaron el sticker que se ve en la foto (que dice Clasificado como entretenimiento adulto por la Ontario Board of Censors)
Además del cambio de color en el fondo y en las imagen de los policías, se recortó la imagen original desapareciendo la firma del ilustrador que estaba en la esquina inferior izquierda.
Lobby cards norteamericanas, usadas para promocionar la película en las salas de los cines. Se imprimían en juegos de 8. La primera (de fondo amarillo) es la de presentación, llamada "Title Card" y las otras 7 tenían una imagen de la película y un mismo borde, usualmente con la misma ilustración del afiche.
Afiche dinamarqués de 60 x 80 centímetros y progama de mano.